“Romero otorga una profundidad mística a la opción por los pobres al invitar a sus lectores a contemplar al Cristo de la pasión en el pueblo sufriente. En un artículo de 1972 trae a colación, sin cita, una frase de Karl Rahner: “La marcha de la historia sólo se entiende proyectándola sobre la pasión de Cristo y viceversa”. Inspirado en esa afirmación, Romero escribe: “Ha sido una conjugación de la pasión de Cristo y de la pasión de nuestro pueblo […] Una verdadera pasión del pueblo, del pueblo pobre que es, en último término, el que tiene que cargar la cruz fabricada por las ambiciones y rivalidades”.

El misterio de la encarnación permitió a Romero descubrir la presenciade Cristo en el rostro de los pueblos sufrientes. En 1971, invitaba a asumir la renovación posconciliar que se encuentra en el documento de Medellín, dado que “el espíritu marcó allí la hora y descubrió el verdadero rostro de la Iglesia de Cristo, encarnada y dando respuesta a nuestros pueblos”.

La contemplación de la Pasión del Señor en la pasión del pueblo tiene entonces hondas connotaciones políticas, pues lleva a la Iglesia a insertarse en el “via crucis nacional” para superar todo odio e injusticia y así permitir la recuperación de la dignidad de todos los hombres en la resurrección. Más adelante, en 1978, con toda la dramática experiencia de la creciente violencia en El Salvador, monseñor Romero hizo una lúcida contemplación política de la pasión cuando afirmó que:

Cristo afeado y dolorido, oprimido y maltratado, no es sólo un individuo de la historia: en él hay que mirar al que carga todas las culpas y las consecuencias de todas las culpas. Él es la mejor figura de un pueblo desfigurado por el pecado de quienes integran este pueblo.

Contemplar a Cristo en los que sufren los atropellos contra sus derechos fundamentales hace que la defensa de esos derechos sea parte del “minis-terio de la Iglesia a la humanidad”. Romero pedía que la Pascua tuviera incidencia social y política en la práctica de la comunidad cristiana. Las comunidades deben convertirse en “cirios de Pascua […] que descubran a nuestra patria los verdaderos caminos de su dignidad, de su paz y de su verdadero progreso”.

La opción por los pobres, fundada en la contemplación de la pasión de Cristo en la pasión del pueblo, será la semilla de lo que podríamos denominar una espiritualidad política; es decir, una fe que puede alimentarse a partir de una contemplación del Señor en la historia, en lo concreto de un mundo lacerado, de un pueblo sufriente. Ellacuría dirá que monseñor Romero contribuyó a historizar la salvación cristiana.”

Farfán Pacheco, M. M., & Ruiz Serna, D. F. (2020). FE-POLÍTICA Y OPCIÓN POR LOS POBRES EN LA PRODUCCIÓN PERIODÍSTICA DE MONSEÑOR ÓSCAR A. ROMERO. Revista Iberoamericana De Teología, 16(31), 43-73. Recuperado a partir de https://ribet.ibero.mx/index.php/ribet/article/view/55

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